Este abogado de profesión, se desempeña como Comisario de Familia del municipio de Encino, Santander, desde marzo de 2020 donde se desenvuelve desde el saber y la ética para cumplir con el deber de servir a la ciudadanía.

Para Gualdrón Santos, “desde el primer momento ha sido muy gratificante porque en un municipio de sexta de categoría es muy difícil; no se cuenta con las herramientas tecnológicas y se enfrentan problemas que no se dan en municipios como San Gil o ciudades como Bucaramanga. Encino cuenta con un 88% de ruralidad en su población; lo que representa una serie de retos en comparación con otras comunidades. Además, que la extensión territorial es bastante grande, haciendo más difícil la movilidad”.

Cuando llegó al municipio, coincidió con el inicio de la contingencia sanitaria por el Covid-19. Debido a las condiciones existentes en el territorio, era muy difícil que trabajara de manera aislada; pues la mayoría de las familias no cuentan con acceso a internet.

Por eso, Ángel Gualdrón siempre estuvo “abierto a llegar a las comunidades, vereda por vereda con las medidas de bioseguridad que fuesen necesarias, pero no abandonar su deber y vocación de servicio por esta circunstancia”.

Desde la oficina de la Comisaria de Familia de Encino, este egresado UNISANGILISTA lidera la campaña ‘GENERACIÓN DIAMANTE’ que busca construir desde las bases de las comunidades del municipio, educando a la población en temas que son tabúes históricos en el territorio; como la violencia intrafamiliar, el trabajo infantil o el embarazo adolescente. Con esto, se busca disminuir problemáticas como los micromachismos y la deserción escolar, trabajando de la mano de profesionales en pedagogía y en primera infancia.

Además, se busca sensibilizar a los padres sobre la crianza afectiva, el respeto por el otro y el afecto hacia la mujer.

Dentro de esa misma línea, se desarrolla la Escuela de Padres en las 13 veradas de Encino donde con la cooperación del Colegio Técnico Agropecuario se convoca a las comunidades para educarlas sobre embarazos adolescente, deserción escolar, acoso sexual y resolución pacífica de conflictos.

Esto llevó a que se pasara de 29 casos denunciados de violencia intrafamiliar en 2020 a 8 en 2021. Sin embrago, para Ángel Gualdrón esto no lo relaja y asegura que se debe buscar “incentivar que la víctima denuncie y no se quede callada por sentirse constreñida por diversas situaciones”.

A esta iniciativa, generalmente, asistían más madres que padres. Por eso, este año se implementó la estrategia de realizar la jornada educativa durante el día del campesino con ayuda de la administración municipal, siendo un éxito total.

Ángel Gualdrón recuerda que durante todo su proceso de formación viajaba todos los días durante 5 años de “Charalá a San Gil, sacrificando tiempo con mis papás. Sacrificio que me hizo pensar que mi estudio debía tener un propósito mayor”.

En cuanto a lo humanitario, Daysi Jhoana Acosta, docente de UNISANGIL que le acompañó en su proceso formativo, focalizó su sentido de “servicio por el otro que ya venía de casa, pero que en UNISANGIL se potenció” y lo ha llevado a entregar su conocimiento en busca del bien social. Para él, “ganar grandes sumas de dinero no es lo realmente importante, sino ayudar a construir una mejor sociedad”

Este abogado entregado al servicio y amor por la profesión, el prójimo y la construcción social, definitivamente es ¡talento UNISANGIL!